Belleza con Alma: Reflexion

 

Hoy, en este Jueves Santo, siento el llamado a compartir desde lo más profundo de mi alma.

La vida, con sus pausas y silencios, me ha enseñado que la belleza no es solo lo que vemos, sino lo que sentimos, lo que honramos, lo que abrazamos.

Desde niña, sentí que el cabello no era solo cabello. Era memoria, energía, expresión, identidad. 

Y así comencé a vivir la peluquería como un arte sagrado.

Un ritual de transformación.
Un espacio donde cada persona pudiera mirarse al espejo y, más que gustarse… reconocerse.

Mi propósito de vida se entrelaza con cada hebra de cabello que acaricio, con cada mirada que me regala confianza, con cada historia que llega a mi sillón.

Quiero que mi trabajo sea un puente.
Un puente entre lo visible y lo invisible.
Entre el cuidado estético y el despertar del alma.
Entre lo que mostramos y lo que somos.

Hoy reafirmo mi compromiso:
🌿 Acompañar desde el respeto, el amor y la presencia.
🌿 Crear espacios donde cada persona pueda ser, sin máscaras.
🌿 Honrar la belleza natural y única de cada ser.
🌿 Elevar el acto de peinar, cortar, maquillar… a un gesto de amor y consciencia.

En esta Semana Santa, en este día de recogimiento y entrega, me entrego también yo a mi misión.
Una misión tejida de intuición, espiritualidad, creatividad y escucha.
Una misión que no me pertenece solo a mí… sino a cada persona que entra en mi salón buscando algo más que un cambio exterior.

Gracias por acompañarme, por resonar, por creer en una belleza con alma.

Con todo mi amor,
Vanessa